Big Dutchman ha conseguido un destacado éxito en EE. UU.: Los gestores de Hillcrest Farms de Great Falls en el estado de Montana se han decidido a equipar su nueva nave de cerdas en grupo, 2.500 ejemplares, con el sistema electrónico Callmatic 2. Las 36 estaciones de alimentación son un componente más de uno de los proyectos más importantes relativos a sistemas de alimentación controlada por ordenador hasta ahora realizados por la empresa de Vechta-Calveslage. El equipamiento va de camino a Montana. Su entrega, montaje y puesta en marcha bajo la dirección profesional de expertos de Big Dutchman es inminente.
Hillcrest Farms es una nueva fundación de la comunidad de creyentes Huteritas, cuyo origen se remonta a los tiempos de la Reforma del siglo XVI. Los cerca de 45.000 seguidores viven casi exclusivamente en EE. UU. y Canadá. Hasta hoy han mantenido las tradiciones de su fundador, procedente del Tirol austriaco. A ellas corresponde entre otras la comunidad de bienes: Los Huteritas desconocen las propiedades personales en la vida económica.
Se asientan en regiones separadas en forma de comunidades, los llamados "Bruderhöfen", con un máximo de 150 miembros; el ramo de actividad principal es la agricultura. Si no hay suficiente trabajo para todos, la mitad de los habitantes abandona la colonia y funda un nuevo "Bruderhof", como los gestores de Hillcrest Farms, que se construyen una existencia completamente nueva. El punto central de la empresa es la gestión de 2.500 cerdas para la producción planificada anual de unos 65.00 lechones.
Gestión de cerdas con futuro
Los Huteritas en EE. UU. tienen fama de ser especialmente innovadores en agricultura. Aunque gran parte de su vida pasa al margen de las conquistas del mundo moderno, en la producción agraria apuestan casi únicamente por los métodos y tecnologías más modernos. La decisión de los Huteritas con respecto a la estación de alimentación Callmatic 2 controlada por ordenador lo demuestra claramente.
Instalación que impresiona
La moderna instalación de cerdas de Hillcrest Farms está compuesta de varias naves, ya que está prevista una nave de cerdas como área de descanso y un centro de servicio. El área de descanso engloba 17 salas con 120 cerdas por sala. Cada sala se equipará con dos estaciones Callmatic 2 de alimentación controlada electrónicamente, así como un detector Big Dutchman de celo.
La siguiente nave de cerdas alberga 8 salas de maternidad con 60 jaulas cada una. Además, hay una zona de adiestramiento donde se instalan otras dos estaciones. Ahí es donde las cerdas de reposición se ejercitan para comer en una estación de control electrónico, para que la transición al área de descanso funcione desde el principio sin dificultades.
El control de la alimentación electrónica se realiza mediante la novísima tecnología BigFarmNet. Se trata de un nuevo sistema de control de la casa Big Dutchman. El software de BigFarmNet fuciona no sólo en el ordenador central, sino también en los controles independientes con los que se equipa cada estación. Las ventajas son claras: se puede acceder directamente a los controles y a la totalidad de los datos de cada estación individual. Esto supone un claro añadido en cuestiones de seguridad: en caso de avería del ordenador central o de la red, las estaciones de alimentación se mantienen en funcionamiento, ya que los controles disponen de una memoria de datos independiente y están conectados entre si.
Tecnología bien pensada, alta funcionalidad
No solo la decisión de los Huteritas sobre la gestión de cerdas en grupos muestra que esta forma de gestión ha conseguido saltar el charco. Otro indicio es que un número creciente de criadores de cerdas de EE. UU. planea cambiar de la gestión de cerdas en jaulas de gestación a la gestión en grupos, adaptada a los animales, incluyendo la alimentación controlada por ordenador. Esto no es de extrañar teniendo en cuenta el gran número de ventajas, como por ejemplo la significativa ampliación en la libertad de movimientos y la mejor condición y robustez de los animales.
Pioneros en alimentación controlada por ordenador
La conexión con Callmatic 2 conlleva animales sanos y mayor éxito en la nave. Para ello hay una buena base: las estaciones de alimentación con comedero cerrado existen desde hace más de 25 años. No obstante Big Dutchman forma parte de las pocas empresas del sector que desde el principio ha implantado y desarrollado constantemente una técnica completa, así como hardware y software para este sistema tan valorado en la gestión de cerdas en grupos.
Así, investigadores en toda Europa destacan la bien pensada estructura del sistema de alimentación de Big Dutchman, que en la práctica permite un sistemático transcurso del día con mucha calma en la nave. Pero también la fiabilidad y la eficiencia de esta tecnología aportan gran satisfacción a los clientes.