En el sector de engorde de pollos, Ulrike y Norbert Markfort de la población de Westladbergen en Westfalia (Alemania) son expertos: Ya hace diez años que el matrimonio puso en marcha su primer nave avícola. Con una nave nueva para 40.000 pollos, el matrimonio ha ampliado el negocio - también para su hijo mayor, que tiene previsto continuar con la empresa familiar. Hace poco, unas 300 personas, invitadas a una jornada de puertas abiertas, acudieron para inspeccionar todos los detalles de la nave nueva con sus instalaciones avícolas de Big Dutchman.
La nueva nave, que mide 20 x 90 metros, se encuentra en los terrenos de la granja, lo cual garantiza la proximidad en el trabajo. Para cumplir con los requisitos actuales de las leyes de protección animal, la familia Markfort ha construido ventanas en un tres por ciento de la superficie básica de la nave.
Instalaciones avícolas para el engorde de pollos
En el engorde de pollos, los Markfort trabajan con captura previa: Una tercera parte de los pollos se sacan de la nave a los 32 días; en este tiempo, los animales han ganado un peso de unos 1.600 g. Las otras dos terceras partes se quedan en la nave hasta el final del período de engorde. La báscula de animales Swing de Big Dutchman permite al matrimonio controlar exactamente el peso de sus animales. La báscula es bien tolerada por los animales, lo cual resulta en muchas pesadas y indicaciones exactas de peso.
Para la alimentación, se utiliza la Augermatic, un clásico de Big Dutchman para el engorde de pollos. Se dispone de un total de cuatro líneas de alimentación. También hay agua fresca en la nave avícola: En un total de ocho líneas de bebederos, los pollos pueden beber agua fresca las 24 horas de día. También aquí, los Markfort han procurado cumplir los requisitos de la protección animal: Las líneas de bebederos disponen de los 3.000 bebederos de tetina obligatorios.
A través de las entradas de aire en las paredes laterales de la nave, entra aire fresco. Al final de la nave, se encuentra una torre de ventilación de unos 12 metros de altura con 14 chimeneas. Con ello, los Markfort han cumplido uno de los requisitos para la construcción de la nave, que pide una velocidad de salida de 7 m/s.