Para llegar a tener su propia granja de cerdas, Luis Juvinel ha recorrido unos 13.300 kilómetros – atravesando medio mundo. El productor emprendedor viene del Paraguay, y durante mucho tiempo fue gerente en Dinamarca, en el sector de manejo de cerdos. Hace ocho años, se mudó de Escandinavia al sureste de Europa. Hoy, Juvinel es propietario de una importante granja de cerdas en Moldavia, y con sus 3.500 cerdas actuales produce lechones en un sistema cerrado.
Instalaciones porcinas y sistemas de alimentación de Vechta
Pero esta instalación cerca de la capital Chişinău, con el nombre poético "Porco bello" - "cerdo bello", todavía tiene más capacidad de producción. A largo plazo, el productor del Paraguay quiere producir lechones con 4.000 cerdas. Para realizar este proyecto ambicioso, Juvinel cuenta con Big Dutchman: gran parte de las instalaciones porcinas son de Vechta-Calveslage. Además, unos sistemas de climatización de Big Dutchman procuran una climatización confortable en las naves nuevas.
Hace diez años, todavía era difícil obtener carne de cerdo de alta calidad en Moldavia. Todo apuntaba a favor del proyecto. Pero desde el principio, sabían que el camino sería, literalmente, de espinas: "Tuve que empezar prácticamente de cero, reconstruyendo todo el complejo de cerdos", recuerda Juvinel. La instalación, erigida en tiempos de los soviets, se encontraba en un estado desolador; la naturaleza había reconquistado el terreno. "Entre tanta maleza, apenas se veían los edificios, y en el tejado de un galón, incluso crecían árboles", dice Juvinel.
Instalación para el manejo de cerdas, rehabilitada por fases
Desde que se iniciaron los primeros trabajos en el 2009, la rehabilitación avanza por fases, pero de forma continuada. Mientras sigue en funcionamiento, se está reconstruyendo una nave tras otra; el final ya está a la vista.
El proceso es dinámico: Parcialmente, se utiliza el equipamiento antiguo, si es que se encuentra en buen estado. Pero sólo hasta que los animales se mudan a su nuevo alojamiento. En su mayoría, los edificios ya están terminados y cuentan con instalaciones modernas, mientras en algunas partes siguen las obras. La duración de la rehabilitación viene determinado por los beneficios que Juvinel logra obtener con sus 110 empleados: "Se reinvierten los beneficios", explica el gerente, Andrej Woltschinskij.
El productor del Paraguay tiene ambiciones: Su objetivo es seguir siendo el número uno para los consumidores del país, con sus productos de alta calidad. Pero también la apertura del mercado de Moldavia es importante. El empresario previsor ya está preparando la competición con otros países europeos.