Por ejemplo, en los países miembros de la Unión Europea la legislación sólo permite el manejo en suelo con acceso a yacija. En otros países, sigue permitido el manejo de pollos sin limitación, también en sistemas sin yacija.
Un ejemplo es Rusia: En este país, el manejo de broilers en sistemas Colony de varios pisos se remonta hasta los años setenta del siglo pasado. Teniendo en cuenta los inviernos duros, en muchos lugares con temperaturas inferiores a los -10 grados, esta solución tiene su lógica: En comparación con el manejo en suelo, ofrece considerable ahorro de energía. También en países donde hay escasez de suelo, sobre todo de suelo rural, se impone la necesidad de aumentar la densidad animal por superficie de base de la nave. Es el caso, por ejemplo, en países densamente poblados como Japón o Corea del Sur. En regiones desérticas y otras zonas del mundo también la escasa disponibilidad de yacija puede ser un factor limitante para la producción.
Desde sus inicios en Rusia, la demanda de los sistemas Colony para broilers va en aumento desde hace unos diez años. Sobre todo los productores de aves en Rusia, del Oriente Próximo y de Asia tienen interés en esta forma de manejo, por las razones ya expuestas.
Además de prescindir de la yacija, el sistema es interesante por las siguientes razones: el tamaño de los grupos de animales en relación con los puestos de alimentación o de bebederos (con 1,8 kg de peso de engorde final, 106 animales por jaula, 8,9 animales por tetina, 53 animales por plato comedero), y el buen acceso a pienso y agua. Estos parámetros permiten a los productores sacar el rendimiento óptimo del potencial genético de los broilers modernos. Además, los animales se encuentran en rejillas de plástico flexibles – se evita el contacto constante con los excrementos. Éstos caen en cintas de estiércol y se retiran de la nave.
No obstante, a pesar de la popularidad del sistema, apenas existen datos científicamente fiables acerca de los parámetros decisivos para la rentabilidad. Por esta razón, la empresa de instalaciones avícolas Big Dutchman, en colaboración con la universidad Georg August de Göttingen, ha realizado un estudio empírico acerca del rendimiento (utilización de pienso, aumento de peso, duración del engorde), teniendo en cuenta criterios del bienestar animal y de la salud animal (entre otros, la salud de la almohadilla plantar) de broilers en un sistema Colony. A continuación, se presentarán los resultados más importantes.
Metodología del estudio
Los datos se recogieron a lo largo de un ciclo de engorde en la nave de un productor de aves. En el momento del estudio, se encontraron 76.230 animales en la nave. La evaluación de los datos se llevó a cabo en el departamento de sistemas productivos para animales de granja en la universidad de Göttingen. La nave investigada mide 18 m de ancho y 110 m de largo, y cuenta con seis filas del sistema para broilers Colony AviMax. Las filas se componen de 42 jaulas de grupo (1,6 m x 2,4 m) por piso y cuatro pisos de altura. Por lo tanto, el número total es de 1.008 unidades del sistema Colony con 76 animales por unidad. La nave cuenta con ventilación transversal de varios niveles de Big Dutchman.Un elemento central de la recogida de datos fue el pesaje diario de unos grupos de control de los animales Ross 308. Para ello, se seleccionaron tres puntos de control por fila, en los que se pesaron diez animales por cada uno de los cuatro pisos de un Colony en la báscula Flex Scale. Los puntos de control se encontraron en el principio, el centro y el final de cada fila. Durante el pesaje, en los días 19 a 34 del ciclo de engorde, también se inspeccionó la almohadilla plantar de los animales.
Rendimiento
Al final del ciclo de engorde, en el día 37, los animales alcanzaron un peso medio de 2.379 gramos. El aumento de peso medio diario fue 64,3 gramos. Debido a los elevados aumentos de peso, el peso de los broilers en el día 32 se encontró dos días enteros por delante del desarrollo de peso estandarizado de la empresa de cría Aviagen (con una mortalidad del 1,33%). Cabe suponer que los aumentos diarios de peso se deben a la buena relación entre animales y puestos de comida y la buena iluminación de los sistemas Colony al inicio del ciclo de engorde.El parámetro de conversión del pienso fue de 1:1,57, un muy buen nivel. Dado que en las rejillas de plástico, las posibles pérdidas de pienso son inmediatamente visibles para el personal vigilante, se pueden tomar medidas en seguida, en caso necesario. Este hecho contribuye a una utilización muy eficaz de los recursos.
Para comparar: De unos análisis del ramo, realizados por la cámara de agricultura de Baja Sajonia en el año 2010, se desprende para las empresas alemanas estudiadas, donde según el derecho de la UE sólo se debe utilizar el sistema de manejo en suelo para los pollos de engorde, se había alcanzado un peso medio de 1.927 kg a los 34,9 días. Los aumentos de peso diarios fueron de 55,1 g, con una conversión del pienso de 1:1,72 (Pieper 2013).
Salud animal
Los problemas con la salud de la almohadilla plantar son conocidos desde hace décadas en el manejo de aves, y representan un problema considerable. En los últimos años, ha aumentado su importancia, teniendo en cuenta aspectos como la protección de animales, la seguridad de alimentos y la disminución de la calidad de las canales. En algunos países europeos, la pododermatitis ya es un indicador para la protección de animales en el engorde de pollos (de Jong 2012). Según Haslam et al. (2007), la enfermedad causa dolor que influye de forma negativa en la salud de los animales y provocan pérdidas de rendimiento. Por ejemplo, puede afectar la capacidad de caminar, puede causar que los broilers no se puedan levantar y tengan que soportar más peso en la zona del pecho. También causa una disminución de la calidad de la canal (Berg 2010). La pododermatitis tiene múltiples factores que la desencadenan; no obstante, la causa más importante, según Shepherd y Fairchild (2010) es la yacija húmeda.Por lo tanto, el indicador pododermatitis fue un parámetro central en el presente estudio para la evaluación del sistema: A partir del día 19 del engorde, 360 animales de los grupos de control fueron estudiados cada tres días en los pesajes, para determinar cambios en la almohadilla plantar. Los cambios se clasificaron en tres clases según el Scoring System de Berk (2007): Score 0 significa almohadilla plantar sin cambios, mientras los animales con un Score 1 de la almohadilla plantar presentan hiperqueratosis, es decir, un engrosamiento excesivo de la piel exterior y hasta lesiones superficiales (heridas). Score 2 se caracteriza por lesiones profundas.
Los resultados muestran que un 98,0 % de los animales investigados no presentó cambios en la almohadilla plantar hasta el día 34 de engorde. Sólo un 2,0% de los animales mostró cambios en la almohadilla plantar, de los cuales 1,4% mostraron cambios leves (Score 1) y sólo un 0,6% lesiones graves (Score 2).
Los muy buenos resultados, en parte, se explican por el escaso contacto de los animales con sus excrementos, es decir, por el suelo seco. Este factor se ve reforzado por el suelo de plástico, que procura contacto constante con el aire y un secado rápido de los pies.
Para comparar: De estudios similares de De Jong et al. (2012) en el manejo en suelo resulta que sólo un 35,5% de los animales no mostró señales de pododermatitis. El 26,1% mostró hiperqueratosis leve y lesiones superficiales (Score 1), y el 38,4% lesiones graves (Score 2). De Jong et al. habían investigado un total de 386 grupos en 138 granjas de los Países Bajos.
Conclusiones
Los resultados obtenidos en el sistema se pueden valorar como buenos por encima de la media. Unos criterios como los aumentos de peso diarios del 64 g y una conversión del pienso de 1:1,57 subrayan las ventajas económicas del sistema de manejo sin yacija: Además la mortalidad y la frecuencia de infecciones en la almohadilla plantar se encontró en un nivel muy bajo. Con ello, no sólo se puede mantener un uso de medicamentos muy reducido, sino se dan, a pesar de unos espacios para movimientos muy reducidos, varias ventajas para el bienestar animal. Autores:Prof. Dr. Dr. M. Gauly, M.Sc. agr. C. Dallmöller (Universidad Georg August de Göttingen, Departamento para ciencias de animales de granja); M. Sc. agr. J. Hurlin (jefe de producto, Big Dutchman International) Publicado en Poultry International, abril 2014